En una decisión sorprendete que marca el tercer cambio en el Ministerio de Justicia bajo el gobierno de Gustavo Petro, Alas María Buitrago ha presentado su renuncia a la posición de Ministra de Justicia, esgrimiendo intentos de intervención que, según ella, comprometen la independencia y la transparencia que deberían guiar el desempeño de sus ejecutivos al frente de dicho cargo.
En una carta fechada el 12 de abril y dirigida directamente al presidente Gustavo Petro, Buitrago comunicó que su decisión de apartarse del ministerio fue fruto de una «profunda reflexión personal y profesional». En este documento, condenó las presiones externas que, a su juicio, ponían en riesgo los principios de independencia y transparencia que habían guiado su gestión.
“Mis acciones no dependen de las influencias ni de amenazas, convicciones o intervenciones políticas, así como de intereses particulares,” subrayó Buitrago, enfatizando que las decisiones de sus gerentes siempre estaban fundamentadas en la ley y la equidad.
Además, reveló que esta presión provenía del Ministro del Interior, Armando Benedetti, y de la jefe del Departamento Administrativo de la Oficina Presidencial (DANPRE), Angie Rodríguez, quienes, según su testimonio, le solicitaron la destitución de ciertos funcionarios, entre ellos a Alexander Rivera, quien se desempeñaba como jefe de la lucha contra las drogas.
Por su parte, Armando Benedetti negó rotundamente tales acusaciones, aseverando que no había ejercido ningún tipo de intervención en el Ministerio de Justicia. «No he solicitado la transferencia de prisioneros ni contratos», afirmó el ministro durante una rueda de prensa.
Durante su gestión, Buitrago implementó diversas iniciativas, como la creación de entornos seguros, redes justas y casas de justicia, que tenían como objetivo proteger los derechos de los ciudadanos y fortalecer el sistema de justicia. Sin embargo, admitió que las restricciónes presupuestarias limitaron el alcance de varios de estos proyectos, lo que complicó aún más su labor.
La renuncia de Buitrago se inscribe en un contexto de tensiones crecientes entre la exministra y el presidente Petro, específicamente en relación con las diferencias que existen respecto a la política de paz integral que promueve el gobierno actual.
Ágela María Buitrago expresó su deseo de que los esfuerzos de paz del presidente Petro se materialicen y dejó claro que está dispuesta a colaborar en la transición propuesta en el Ministerio de Justicia. Este compromiso indica su interés por el bienestar del país, a pesar de las diferencias que surgieron en su tiempo al frente de la cartera.
Se espera que el gobierno ahora enfrente el desafío de encontrar un reemplazo que pueda no solo tomar el relevo de Buitrago, sino también manejar adecuadamente las tensiones existentes y continuar con las iniciativas que beneficiarán la justicia y la paz en Colombia.
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