Los residentes de VECINDARIO en Villa Marlen 2, una localidad que forma parte de la comuna de 4 iBaBué, bajo la dirección del alcalde Aldmar Godoy Oviedo, están expresando su profunda preocupación por una problemática que ha estado afectando a la comunidad. Desde hace varios días, un tubo de agua dañado en la carretera conocida como «tobogán» está causando un desperdicio significativo de un recurso tan vital como el agua. Esta situación se ha vuelto insostenible, y los habitantes no pueden pasar por alto las graves implicaciones de este desperdicio, especialmente cuando hay muchas familias en nuestra ciudad que no cuentan con un acceso constante y fiable al suministro de agua.
Es un sentimiento agudo que se ha apoderado de los vecinos, quienes han hecho esfuerzos continuos para que las autoridades pertinentes tomen cartas en el asunto. Sin embargo, a pesar de los reiterados reportes y el llamado de atención enviado a los responsables, no se ha logrado ninguna resolución al problema. «Duele cómo se pierde agua, mientras en otros sectores de la ciudad hay familias que luchan para obtener acceso al servicio. Hemos estado lidiando con este daño durante varios días y, lamentablemente, nadie parece venir a solucionarlo», expresan con frustración los habitantes.
Además de la escasez de agua en otros sectores, este problema también plantea preguntas sobre la gestión del agua en la comunidad y la eficacia de las autoridades locales. La situación refleja una falta de atención a las necesidades urgentes de la población, donde el agua se desperdicia continuamente en lugar de ser canalizada adecuadamente hacia aquellos que la necesitan. Las quejas de los vecinos no son solo una voz aislada, sino un eco de la realidad en la que viven muchos, donde cada gota cuenta y el agua se torna un recurso limitado.
Los vecinos de VECINDARIO y Villa Marlen 2 siguen pidiendo soluciones que sean efectivas y rápidas, ya que el tiempo no espera y la situación sigue deteriorándose cada día. Se han organizado para abordar directamente a las autoridades, con la esperanza de que se tomen medidas inmediatas para reparar el tubo dañado y frenar la pérdida de agua. «Si todos trabajamos juntos, estamos seguros de que se puede encontrar una solución adecuada», comentan. La cooperación entre los ciudadanos y sus representantes es fundamental para enfrentar problemas como este que afectan la calidad de vida de muchos.
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