Gran parte de los conocedores de la prensa y el fútbol querían ver a Kevin Serna usando la camiseta del equipo nacional colombiano. Periodistas como Julián Capera, Carlos Antonio Vélez y César Augusto Londoño han solicitado su llamada con firmeza.
Serna llegó a Fluminense en julio de 2024 después de resaltar en Alianza Lima, con una transferencia cercana a 1.8 millones de dólares por el 70 % de sus derechos. Desde entonces, sus cifras hablan por sí mismas: en 2024 jugó 34 juegos y marcó 6 goles en todas las competiciones.
En 2025 agrega 16 juegos con 3 goles en la liga y 2 asistencias. En el Brasileirao tiene 3 goles en 16 juegos, además de 2 pases de gol. Su influencia en el equipo va más allá de sus contribuciones directas en los goles, ya que es un jugador fundamental en el ataque de ‘gripe’.
¿Qué hace un reclamo válido? Tu estilo explosivo. Mide 1,82 m, juega como un extremo derecho y se destaca por su velocidad, pantalones cortos y confianza en los momentos clave.
En su debut de Brasilira, asistió al objetivo de La Victoria contra Palmeiras; Poco tiempo después, venció al Atlético Mineiro y fue elegido el mejor de la cancha.
Julián Capera ha destacado su impacto inmediato en el fútbol brasileño; Carlos Antonio Vélez habló de su actuación decisiva y lo resume como una repulsión que trae frescura ofensiva. César Augusto Londoño, mientras tanto, ha dicho en sus columnas que el equipo nacional necesita «nuevo aire» y describió su inclusión de «inevitable».
Serna no es otro nombre: acumuló 65 juegos, 11 goles y 7 asistencias con Fluminense. Su velocidad, capacidad de desequilibrio y crecimiento reciente lo convierten en un claro candidato para satisfacer los medios de comunicación y la demanda emocional de su país.
El no informó el final fue sorprendente porque ya se había confirmado que estaba en la lista de preconvocados del equipo nacional colombiano y todo indicó que Nérstor Lorenzo lo llamó.
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