El presidente Gustavo Petro anunció el jueves por la noche, el final de la huelga minera en Boyacá, después de llegar a un acuerdo con representantes de la pequeña minería de carbón del departamento. El principal punto de comprensión fue la implementación del cruce de energía «responsable y consensual» con entidades locales.
El día del diálogo, que tuvo lugar en Paipa, asistieron el Ministerio de Minas, el Ministerio del Interior, la Agencia Nacional de Minería, los Congresistas, los líderes mineros y las autoridades de la facultad. Los portavoces del sector presentaron una hoja de diez puntos, en la que pidieron certeza legal para sus actividades, el final de la criminalización de la minería de carbón y la garantía de cambiar el modelo de producción.
Después del acuerdo, se construyeron cerraduras estratégicas de carreteras, como Paipa, Sogamoso, Tópaga, Nobs y Socha, que fue confirmado por el gobernador de Boyacá, Carlos Amaya, quien describió el pacto como «histórico» para la dignidad y el bienestar de las familias mineras.
El gobernador de Cundinamarca, José Emilio Rey, explicó que los pasivos incluyen no imponer el IVA o las nuevas tarifas para los pequeños productores, navegar por los cálculos de las tarifas de licencia, facilitar los acuerdos de pago de la deuda y abrir nuevos mercados internacionales de carbón.
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