El pasado encuentro entre Deportivo Pasto y Junior de Barranquilla culminó en un emocionante empate de 3-3 en el estadio Libertad, en el marco de la 13ª fecha de la liga Betplay 2025-I. Este choque fue crucial en la lucha por los puestos de clasificación a los playoff, ya que ambos equipos tienen firmes aspiraciones de llegar a la fase decisiva del torneo. A pesar de que ninguno de los dos conjuntos logró llevarse el triunfo, la escuadra de Barranquilla salió beneficiada en términos de posiciones en la tabla.
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El Junior de Barranquilla, bajo la dirección del entrenador Arturo Reyes, aprovechó el empate para alcanzar el liderazgo del campeonato. Con esta igualada, los rojiblancos sumaron un total de 24 puntos, lo que les permite posicionarse en la cima de la tabla de clasificación de manera singular. Este resultado refuerza la moral del equipo, que confía en sus capacidades para mantener esta ventaja en las próximas fechas del torneo.
Por su parte, César Farías, el director técnico de Deportivo Pasto, no ocultó su descontento tras el encuentro, expresando una clara advertencia a sus jugadores sobre la necesidad de mejorar su concentración y compromiso en los partidos restantes del campeonato. La escuadra nariñense dejó escapar una victoria crucial en su estadio, lo que les impidió hacer su entrada al grupo de los ocho mejores del torneo. Con este resultado, el Deportivo Pasto se vio empatado en puntos con el Deportivo Cali (20), aunque una diferencia de goles menos favorable los mantiene alejados de los puestos de clasificación directa.
El encuentro contó con la presencia de Carlos Ortega, árbitro del Departamento de Bolívar, quien tuvo la tarea de impartir justicia en un partido lleno de emociones desde el inicio hasta el final. Lisandro Castillo, desde Bogotá, estuvo presente como asistente de video (VAR), supervisando las acciones más controversiales que se dieron durante el actual duelo, lo que es fundamental para asegurar la transparencia del juego.
Aunque Junior de Barranquilla recibió tres goles en su arco, demostró una notable capacidad ofensiva al conseguir un empate valioso, posicionándose como el único líder del fútbol colombiano profesional y manteniendo una alta dosis de confianza para afrontar los siguientes retos en el torneo apertura.
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