El primer tribunal civil de un circuito especializado en el Pasto de Restitud de Tierras ha tomado una decisión trascendental al otorgar una demanda que fue presentada en favor del Consejo Comunitario Renacer Campesino, que se encuentra situado en el municipio de Barbacoas, Nariño. Este fallo es un hito importante en el camino hacia la justicia y la equidad social para esta comunidad que ha enfrentado numerosas dificultades a lo largo de los años.
La reciente decisión judicial no solo es un reconocimiento formal de los derechos de esta comunidad, sino que también representa una oportunidad valiosa para abordar varios desafíos importantes. Entre estos desafíos se encuentran el uso adecuado de la tierra, el acceso a servicios básicos imprescindibles, así como cuestiones fundamentales relacionadas con la educación, la salud y la atención a las problemáticas ambientales que afectan su entorno.
Este proceso se encuentra enmarcado en el contexto de la Ley 1448 de 2011 y en los Decretos 4635 de 2011, las cuales reconocen y respaldan los derechos de las personas y sus antepasados a vivir y desarrollarse en sus tierras tradicionales. La demanda presentada busca la restitución del territorio correspondiente a 210 familias, abarcando un total de 6529 hectáreas más 3368 metros cuadrados, lo cual es fundamental para la supervivencia y el bienestar de esta comunidad. La recuperación de estas tierras permitirá no solo la seguridad alimentaria, sino también el fortalecimiento de sus lazos culturales.
Como parte de las medidas de protección que el tribunal ha ordenado para esta comunidad, se han establecido procedimientos que deben ser suspendidos para evitar cualquier afectación adicional mientras se aborda el reclamo. Esto proporciona un momento crucial de respiro y esperanza en un proceso que podría haber enfrentado muchas complicaciones. Entre las entidades que están colaborando en este proceso están el Ministerio del Interior, la Agencia Nacional de Tierras, la Oficina del Defensor del Pueblo, el gobierno de Nariño y la Unidad de Víctimas, cada una aportando su experiencia y recursos para facilitar un acompañamiento integral durante este proceso.
Además, es importante mencionar que URT Nariño, bajo la dirección de María Estefany, está desarrollando diversas estrategias que buscan garantizar que la oferta institucional llegue efectivamente a quienes más la necesitan. En este esfuerzo, se están considerando las particularidades de cada territorio en la región del Pacífico para asegurar que la ayuda sea pertinente y efectiva.
El Consejo Comunitario Renacer Campesino ha mantenido viva su organización, así como sus raíces y tradiciones, a pesar de las múltiples adversidades que han impactado a la región. Esta nueva solicitud de restitución no solo representa la posibilidad de recuperar tierras, sino que, sin duda, le permitirá a la comunidad recuperar su capacidad para decidir sobre su futuro y mantener viva su identidad cultural.
De esta manera, este fallo judicial no solo se traduce en un avance significativo en la lucha por los derechos territoriales y sociales, sino que también enciende la esperanza de un futuro más justo y sostenible para las generaciones venideras.
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