En la reciente intervención efectuada por el Ministro de Castilla La Nueva, Jhon Ramírez, se ha manifestado una profunda inquietud respecto a la situación actual de la compañía de servicios públicos, Aguas de Castilla. En particular, Ramírez ha señalado que existe una creciente insatisfacción entre los ciudadanos, sentimiento que ha cobrado relevancia especialmente tras la falta de recolección de residuos que se experimentó de manera constante la semana pasada. Estas condiciones reflejan fallos en las operaciones de la compañía, los cuales han sido atribuidos a problemas mecánicos y logísticos en los vehículos destinados a la recolección de desechos.
Rompecabezas
Además, Ramírez destacó que, hasta la fecha, se han movido un total abrumador de 1,473,128 millones de pesos en subsidios destinados a los estratos 1, 2 y 3 de la población. Sin embargo, enfatizó que, a pesar de esta considerable inversión, no se han observado mejoras concretas en el servicio. Los ciudadanos han comenzado a reportar que sus recibos son más costosos que antes, lo que añade más leña al fuego de la insatisfacción general. «Es realmente inaceptable que, a pesar de contar con estos recursos destinados a mejorar los servicios públicos, los usuarios tengan la percepción de que el servicio no solo no mejora, sino que sus costos siguen en aumento», subrayó el ministro con un tono firme y determinante.
Dinero
En su intervención, Jhon Ramírez también presentó cifras adicionales que ilustran la magnitud del financiamiento para fortalecer los servicios públicos. Mencionó que han sido destinados 3,708,076 millones de pesos para respaldar la reunión mixta de Sierra Nevada, además de 407,141,240 millones para auditorías y 49,000,000 millones para la implementación de sistemas de monitoreo. En total, esto suma más de 5,637,000 millones de pesos, cantidad que, según él, debería ser más que suficiente para llevar a cabo mejoras significativas en el servicio.
Fondo mixto
El Fondo Sierra Nevada se presenta como uno de los numerosos fondos mixtos que existen en el país. Estos fondos están constituidos como organizaciones no lucrativas que son financiadas por una combinación de recursos públicos y privados, pero su gestión está a cargo de entidades privadas. Esta estructura les otorga la libertad de establecer su propia junta de contratación, a pesar de que manejan recursos públicos. Al no estar obligados a seguir los criterios establecidos por la Ley 80, han llegado a ser considerados como los «contratos» más grandes y cuestionables del país. Esta dinámica se ha convertido en una vía propicia para el manejo corrupto de los recursos públicos, favoreciendo así a un pequeño grupo en detrimento del bienestar general.
Finalmente, el Ministro Ramírez realizó un llamado directo al alcalde Lenito Castro, instándolo a «enfrentar a la comunidad y proporcionar explicaciones sobre la situación actual de Aguas de Castilla», ya que ha habido un silencio en la gestión que resulta inaceptable. Ramírez ha destacado la importancia de la transparencia en la administración de estos recursos, afirmando que solicitará información clara y detallada sobre todos los acuerdos alcanzados, lo que será sujeto a estrictas auditorías por parte de su equipo. «Invito a mis colegas a involucrarse activamente en esta campaña de gestión; no todo puede continuar como si nada, aplaudiendo y en silencio», concluyó el ministro, enfatizando la necesidad urgente de un cambio.
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