La investigación sobre un brutal intento de robo a una joyería en un centro comercial de Bucaramanga ha dado un giro decisivo luego de que la Fiscalía General de la República revelara a un juez el presunto papel de un policía en la planificación del robo. El uniformado, identificado como Richard José Sierra Bravo, fue detenido el 5 de diciembre y puesto en prisión preventiva a solicitud de la Fiscalía.
De las pruebas presentadas se desprende que Sierra Bravo cooperó con la estructura criminal responsable del robo ocurrido el 29 de noviembre. En este ataque fue asesinado un miembro de la Policía Nacional de Colombia que intentó frustrar el robo.
La Fiscalía argumenta que desde octubre del año pasado, el teniente de alcalde venía realizando vigilancias con el fin de seleccionar una joyería -ubicada en el Centro Comercial Cuarta Etapa- como objeto del robo. Además, presuntamente recibió un teléfono móvil de parte de los delincuentes, el cual fue utilizado para coordinar el ingreso al local a través de una conversación grupal.
Durante el interrogatorio se explicó que su función no se limitaba a la vigilancia, sino que también consistía en advertir a la banda criminal en tiempo real sobre el momento exacto de la acción, lo que facilitaría el robo. A cambio, aparentemente el teniente de alcalde negociaría un porcentaje de las ganancias obtenidas por la venta de las joyas.
La Fiscalía imputó a Sierra Bravo los delitos de homicidio agravado, cohecho, tentativa de hurto agravado y robo agravado, así como producción, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego. El uniformado se declaró inocente de los cargos.
El juez de revisión de garantías consideró que las pruebas presentadas eran suficientes para imponerle una medida de seguridad en el centro penitenciario, teniendo en cuenta el posible riesgo de obstrucción de la justicia si permanecía en libertad.
Este caso resalta la gravedad de la presunta infiltración de miembros de la fuerza pública en estructuras criminales y reaviva preocupaciones sobre la integridad institucional y el control interno de la Policía Nacional.
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