La intensa lluvia que se presentó en las primeras horas de la madrugada de este domingo provocó una significativa inundación en la red que transporta agua hacia la planta de tratamiento de aguas residuales de Chembbe. Este fenómeno meteorológico inesperado causó una serie de problemas en la infraestructura, obligando a las autoridades a actuar con rapidez para minimizar el impacto de la situación.
En respuesta a esta problemática, Ibal, la entidad encargada de la gestión del agua en la región, activó de inmediato los protocolos de atención de emergencia. Esto incluyó el desplazamiento de personal operativo capacitado que se dedicó a realizar las acciones de limpieza necesarias para restaurar la normalidad en el sistema de drenaje y asegurar que los servicios no se interrumpieran en exceso.
El ingeniero Fabián Tinoco, quien se desempeña como director operativo de Ibal, detalló que las labores se están llevando a cabo conforme a todas las regulaciones exigidas por las autoridades pertinentes. Aseguró que la compañía está comprometida en trabajar de manera continua para garantizar que el suministro de aguas residuales se mantenga eficaz, a pesar del adverso clima. “Nuestro equipo está llevando a cabo tareas dentro de la lavandería en la línea, lo que ha permitido mantener niveles óptimos en el tanque de Alsacia, además de garantizar que los usuarios de la séptima comuna cuenten con el servicio de saneamiento adecuado”, explicó.
Es prioritario para Ibal no solo responder ante situaciones de emergencia, sino también anticiparse a posibles eventualidades en el futuro. Por ello, se están implementando estrategias a largo plazo que involucren la mejora de la infraestructura existente, así como la modernización de las instalaciones para evitar que situaciones como la ocurrida en la madrugada de este domingo se repitan. La compañía también está en constante proceso de evaluación de riesgos y de planificación de contingencias que les permita actuar de manera eficaz y oportuna frente a situaciones climáticas extremas.
La seguridad y la salud de la comunidad son fundamentales, y es por ello que cada acción emprendida por Ibal tiene como objetivo no solo la funcionalidad del servicio de tratamiento de aguas residuales, sino también la protección del medio ambiente y la calidad de vida de los ciudadanos. En esta línea, la colaboración entre Ibal y la comunidad es crucial para asegurar el éxito de las operaciones y fomentar una cultura de cuidado y respeto hacia el medio ambiente.
La situación se encuentra bajo control y el equipo de Ibal seguirá trabajando incansablemente para restablecer completamente el sistema y asegurar que no haya inconvenientes en el futuro. 6
