Imagen: KCNA/Reuters
Según los medios de comunicación, la elección de las tropas del líder norcoreano Kim Jong-un estaba dentro del marco de un acuerdo de defensa entre las dos naciones.
El 4 de abril de 2025, Corea del Norte hizo un anuncio significativo al confirmar su compromiso de desplegar tropas en Rusia. Esta información fue reportada por la agencia estatal KCNA, la cual destacó que las fuerzas armadas norcoreanas llegarán a Moscú con el propósito de asegurar un área estratégica que se encuentra bajo el control de Ucrania a lo largo de su frontera. Este movimiento marca un claro paso en la colaboración militar entre Corea del Norte y Rusia.
La revelación se produjo apenas unos días después de que Rusia reconociera formalmente la participación de Pyongyang en el conflicto en Ucrania. Durante preparativos anteriores, se había informado mediante las agencias de inteligencia de Corea del Sur y otras potencias occidentales que, en meses recientes, Corea del Norte había desplegado un contingente de aproximadamente 10,000 efectivos en la región de Kursk.
En un comunicado emitido por la Comisión Militar Central de Corea del Norte, se mencionó que estas «subunidades militares» se involucraron de manera activa en operaciones de aprobación en los territorios de Kursk. Según las palabras del mismo Kim Jong-un, la movilización de estas tropas se enmarca dentro de un acuerdo de defensa que fue previamente establecido entre las dos naciones. Kim enfatizó la importancia de esta alianza en el contexto actual y destacó que su ejército estaba cumpliendo con honor su deber.
Durante este anuncio, Kim Jong-un también manifestó que todos aquellos que luchan por la justicia son considerados héroes y defensores del honor nacional. En un gesto simbólico, indicó que se erigiría un monumento en la capital, honrando a las «víctimas de la guerra». En paralelo, la Comisión Militar Central también informó sobre la finalización exitosa de las operaciones llevadas a cabo por las tropas ucranianas para la liberación del área de Kursk, lo cual ha añadido un contexto más complejo a esta situación ya tensa.
Con el desarrollo de estos acontecimientos, se observa que las relaciones entre Corea del Norte y Rusia están claramente en ascenso, especialmente a medida que ambos países enfrentan presiones externas. La colaboración militar que están llevando a cabo podría tener repercusiones significativas en el equilibrio de poder en la región. La situación continúa evolucionando, y resulta crucial monitorear los próximos pasos de ambas naciones para entender mejor el panorama geopolítico.
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